Descripción
¿Por qué no nací en la familia de Bill Gates o de LeBron James? ¿Por qué no nací en el hogar de un millonario famoso? Porque Dios en su soberanía e infinita sabiduría te hizo nace en una familia cristiana con un llamado divino para servir en la mejor y más grande empresa del Creador del universo.
Ser HDM es pertenecer a un gran equipo de comunicadores de las verdades divinas a fin de que todos los seres humanos vengan al conocimiento de la Palabra de Dios. Ser HDM es convertirnos en instrumentos del Todopoderoso para alcanzar a jóvenes y señoritas y rescatarlos de las ofertas que el mundo ofrece para destruirlos, para traer libertad a quienes están atados en adicciones y depresiones que van deteriorando sus vidas.
Ser HDM es un privilegio que el Señor nos da, y bajo la dirección de su Espíritu trabajamos para el Reino de Dios mediante diversas estrategias que fortalecen la fe de otros creyentes, consolidamos a quienes inician en el ministerio y extendemos la bendita obra de nuestro Salvador. Como HDM podemos comprender que solo por su gracia fuimos escogidos por Dios para formar parte de una familia ministerial con el propósito de servir, construir y edificar a los creyentes en la Iglesia que el Señor puso en nuestras manos.
No hay satisfacción más grande que hacer la voluntad de nuestro eterno Salvador. No existe mayor recompensa que la que Dios da a quienes le servimos por amor. En cada HDM se cumple el plan estratégico de nuestro Redentor y sus cuidados para con nosotros son maravillosos.
En este libro cada HDM encontrará una dirección correcta, y señalamientos específicos por parte del Espíritu Santo para caminar dentro de los propósitos del único Dios verdadero. Legado es un documento escrito por excelentes hombres de Dios, con fundamentos bíblicos para instruir y enseñar los principios y cimientos sólidos para fortalecer la fe, y así poder vivir en congruencia con las ideas que predicamos.
Hoy más que nunca los HDM tenemos la oportunidad de honrar a Aquel que nos salvó, ejercitando un ministerio con un alto sentido de responsabilidad, permaneciendo firmes, sirviendo en el Reino de Dios.
